En los últimos meses me he puesto a pensar mucho sobre el amor, qué
significa, cómo llega, cómo lo defines… Creo que soy una más de la multitud de
personas que meditan al respecto diario cuestionándose: “¿Qué es el amor?” Miles
de años han pasado, millones de libros, canciones, películas y posts de blogs
han sido dedicados al tema y la realidad es que jamás se encuentra una
respuesta. Digo, debería ser tan fácil: tú quieres a una persona, esa persona
te quiere a ti y lo demás no debería de importar. Suena fácil, ¿no? Entonces,
¿por qué no lo es?
Hace un par de meses tuve la oportunidad de entrevistar a Shailene
Woodley para The Fault in Our Stars y
al preguntarle cuales eran los mejores consejos que John Green –el escritor de
la novela– le había dicho, mencionó algo que me dejó muy marcada. Me dijo: “We all think we are planets, and everyone
else are stars that revolve around us. What we forget is that they think as
themselves as their own planet”. Sus palabras hicieron un click en mí, me
dejaron pensando por días y me di cuenta que la clave está ahí: nadie puede
definir qué es lo que hace que el amor funcione, porque la respuesta es
individual –lo que es irónico, porque ese sentimiento es algo que forzosamente
es compartido. No hay una respuesta universal porque absolutamente todos
tenemos una expectativa diferente del amor. Y no sólo me refiero al romántico,
hablo de todo tipo de relación que involucre emoción: amistades, hermanos,
padres…
Todos somos planetas y conforme vas creciendo tus experiencias te van
haciendo más reservado, más temeroso y exigente a lo que buscas en otras
personas. Sólo tienes lo que puedes ofrecer y, a la vez, te da miedo recibir lo
que los demás tienen para dar. A todos nos han lastimado y todos hemos
lastimado y abrirte se vuelve más difícil. Es un extraño círculo vicioso que
sólo se rompe de vez en cuando, cuando la gente indicada llega a tu vida. Pero,
es igual de complicado identificar cuando alguien vale la pena o no.
La clave –o mi respuesta a la incógnita–, creo, es asumir con valentía
a ése alguien que te inspire, que te de ése cierto elemento que por más
ensayos, poemas y libros que escribas jamás vas a poder explicar. Me ha tocado
que le llamen magia, y tal vez lo es, pero definitivamente eso es lo que yo
busco, lo que quiero para mí y es lo que quiero ofrecer. Como dicen por ahí, la
vida tiene mucha mierda para que el amor sea mediocre.
– Cris Vales
Twitter: @crisvales